Posiciones sexuales que puedes disfrutar después de la menopausia

Es importante tener en cuenta que las preferencias y deseos sexuales pueden variar ampliamente entre las personas, independientemente de su edad o estado menopáusico. Dicho esto, hay algunas posiciones sexuales que pueden ser más cómodas o placenteras para las personas después de la menopausia, cuando factores como la sequedad vaginal, la disminución del deseo sexual y los cambios en la flexibilidad física pueden entrar en juego.

Aquí hay algunas posiciones sexuales que podrían resultar placenteras después de la menopausia:

1. Cucharita: Esta posición implica acostarse de costado, con la pareja detrás de usted, también acostada de costado. Esta puede ser una posición cómoda para personas que experimentan dolor o molestias durante el sexo penetrativo. También permite un fácil acceso al clítoris y otras zonas erógenas.

2. La mujer arriba: En esta posición, la pareja receptora (a menudo la persona con una vagina) se sienta sobre su pareja y toma el control del ritmo y la profundidad de la penetración. Esto puede ser una buena opción para personas que experimentan incomodidad con una penetración profunda o para aquellos que quieren tener más control sobre su placer.

3. Acostados de costado: Similar a la posición de cucharita, esta posición implica acostarse de costado, pero mirándose el uno al otro. Esta posición puede ser cómoda para personas que experimentan dolor o molestias durante el coito y puede permitir la intimidad y el contacto visual.

4. Estilo perrito modificado: Esta posición implica que la pareja receptora se ponga de rodillas y manos en el suelo, mientras que la pareja penetrante entra desde atrás. Sin embargo, esta posición se puede modificar para hacerla más cómoda usando almohadas o cojines para apoyar las rodillas o caderas de la pareja receptora y ajustando el ángulo de penetración para evitar molestias.

5. Masaje sensual: Si bien no es técnicamente una posición sexual, el masaje sensual puede ser una excelente manera de explorar la intimidad y el placer sin penetración. Esto puede implicar el uso de las manos, la boca u otras partes del cuerpo para tocar y acariciar a su pareja, centrándose en las zonas erógenas y las áreas de tensión o placer.

Recuerde que la comunicación con su pareja es clave cuando se trata de explorar el sexo después de la menopausia. No tenga miedo de hablar sobre lo que se siente bien y lo que no, y de experimentar con diferentes posiciones, sensaciones y tipos de toque. Y si está experimentando dolor o molestias durante el sexo, no dude en hablar con un profesional de la salud para explorar posibles tratamientos o soluciones.